En un hecho sin precedentes en la historia de la competición, los partidos que iban a disputar David Ferrer frente a Novak Djokovic y Rafael Nadal ante Janko Tipsarevic debieron suspenderse el jueves a medianoche tras ser inspeccionadas las instalaciones del estadio construido para la ocasión en el parque Terra Mítica.
En principio, los primeros dos puntos se disputarán el sábado, el dobles el domingo y los restantes individuales el lunes, pero en las primeras horas del viernes habrá una nueva revisión de la estructura del recinto por parte de los ingenieros y responsables de seguridad. En base a ella, la organización tomará una nueva decisión.
“El viento hizo volar sillas de la parte de arriba y la estructura quedó comprometida”, explicó Soren Frienel, portavoz de la Federación Internacional de Tenis (ITF). Frienel destacó su “esperanza” de que los problemas puedan solucionarse a tiempo.
Por su parte, la Federación Española de Tenis destacó en un comunicado que la cancelación “se ha hecho para garantizar de forma absoluta la seguridad de los espectadores”
Benidorm, una ciudad balnearia ubicada en la costa alicantina del Mar Mediterráneo, sufrió durante todo el jueves ráfagas de viento que alcanzaron los 90 km/h. El estadio tiene capacidad para 16.000 espectadores y es la estructura metálica más grande de Europa, con 24 metros de altura en sus zonas más altas.